El servicio de Pediatría del HMS se encarga del adecuado crecimiento y desarrollo de los niños. Es decir, su propósito es la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades que aparecen durante la infancia. El Departamento cuenta con un equipo de trabajo del más alto nivel y orienta su esfuerzo a un trabajo en equipo, multidisciplinario y multiprofesional, entregando un servicio de calidad.
El HMS cuenta con un área de Pediatría ambulatoria donde se realizan las consultas médicas y un área de Pediatría hospitalizados, con 11 camas de cuidados básicos y 6 camas aisladas en la Unidad de Paciente Crítico Pediátrico (UPCP).
Para tranquilidad de los padres, el paciente pediátrico puede permanecer acompañado por un familiar adulto durante su estadía en el Hospital. Esto debido a la La Ley Mila, que regula el derecho a la compañía de los pacientes pediátricos hospitalizados, garantizando condiciones dignas y un trato respetuoso a los pacientes y sus cuidadores, incorporándose además a los Derechos del Niño.
Es importante asistir al pediatra periódicamente para los controles de niño sano. Así también, cada vez que curse con una patología aguda o sospecha de alguna anormalidad (ej. pubertad adelantada o retrasada, alteraciones de columna, dolores óseos y/o de articulaciones, disminución de la agudeza visual o audición, bajo rendimiento escolar o de auto-estima, trastornos del ánimo y/o apetito, baja o alza de peso brusca , etc.)
- Control de Niño Sano.
- Enfermedades respiratorias agudas.
- Erupciones cutáneas y/o pestes (exantemas).
- Problemas en la alimentación por déficit y/o por exceso
- Sospecha de alergias alimentarias.
- Alteraciones en el Desarrollo Psicomotor (DSM), conductual y/o cognitivo o de aprendizaje.
- Sospecha de pubertad precoz y/o retardada.
- Detección temprana de alteraciones posturales y/o estructurales del aparato locomotor.
- Actualización en inmunizaciones y/o vacunas
- Evaluación integral de la adolescencia.
- Derivación a cirugía infantil para resolución de las patologías más comunes en pediatría como fimosis, testículos no descendidos.